Un estudio mostró que una persona perfeccionista tiene mayor ansiedad y más dolor de cabeza.
La carga de perfeccionismo se valora socialmente en diversos campos de la vida. Esto puede explicar el número de individuos ansiosos que existen en el mundo hoy en día.
1. La persona perfeccionista sufre de frustración y miedo
Nuestra cultura ha favorecido que cada empresa quiera un empleado que llega a ese nivel. Por lo que la irritación y la ansiedad son comunes porque hay miedo y frustración.
2. La persona perfeccionista se critica duramente
Los psicólogos durante mucho tiempo han estado fascinados por los efectos del perfeccionismo. Este es un rasgo de personalidad que abarca excesivamente altos estándares personales. Pero también van unidos con una dura autocrítica. Sin embargo, este es el primer estudio en considerar sus efectos completos.
3. La persona perfeccionista vive agotada
Una revisión detallada de la investigación, encontró que el perfeccionismo está estrechamente relacionado con el agotamiento. Este es un síndrome asociado con el estrés crónico. Este se manifiesta como fatiga extrema y baja realización percibida.
Sus hallazgos son relevantes a través de la educación y en los deportes. Pero los investigadores encontraron que esta relación es particularmente fuerte en los entornos de trabajo. Esto es impulsado cada vez más por un foco en resultados que reina en el lugar de trabajo moderno.
En este entorno, los malos resultados conllevan a costos significativos. Las tendencias perfeccionistas se agravan a menudo. Lo cual conduce a un mayor estrés y un peor rendimiento y falta de innovación para las organizaciones.
Dr. Thomas Curran, profesor de Psicología del Deporte y co-autor de la investigación, explica: «Como sociedad tenemos la tendencia a mantener el perfeccionismo como una señal de virtud o de alto rendimiento. Sin embargo, nuestros resultados muestran que el perfeccionismo es un rasgo en gran medida destructivo».
«Sugerimos que sus efectos pueden ser administrados. Las organizaciones tienen que tener claro que la perfección no es un criterio de éxito. En cambio, la diligencia, la flexibilidad y la perseverancia son mucho mejores cualidades».
El Dr. Andrew Hill, Profesor Asociado en la Universidad de York St John, añadió: «Con demasiada frecuencia, la gente confunde el perfeccionismo con características más deseables tales como ser consiente».
«En lugar de ser más productivos, los perfeccionistas es probable que encuentren el lugar de trabajo bastante difícil y estresante. Nuestra investigación sugiere que si los perfeccionistas son incapaces de hacer frente a las demandas y la incertidumbre en el lugar de trabajo, van a experimentar una serie de dificultades emocionales».
El estudio fue una colaboración entre la Universidad británica de Bath y York St John University (1).
Recursos externos: (1) psycnet.apa.org
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