Los científicos muestran que la adicción al celular afecta la química del cerebro. Esto conlleva al desarrollo de trastornos como el déficit de atención.
Si usted se pone ansioso en gran manera cuando no encuentra su smartphone podría tener una adicción al celular.
Cuando la unidad está fuera de su alcance, un sentimiento de ansiedad a menudo toma cuenta del usuario. Solamente cuando lo tiene otra vez en la mano resurge el alivio.
Si esto es común en usted diariamente, debe encender la señal amarilla.
Esto de acuerdo con un estudio dirigido por investigadores de la Universidad de Seúl, Corea del Sur. La dependencia de los teléfonos inteligentes ya puede llamarse adicción.
Esto se debe a que su uso excesivo produce cambios químicos en el cerebro. De la misma forma que las reacciones y los síntomas de abstinencia ocurren en los drogadictos.
En el estudio, los científicos utilizaron un tipo particular de resonancia magnética que analiza la composición química del cerebro. Con esta observaron a diecinueve adolescentes con hábitos clínicamente diagnosticados como adictos a los móviles.
Luego compararon los resultados con los grupos de jóvenes que utilizan el dispositivo, pero no son dependientes.
En el estudio también tuvo en cuenta otros parámetros. Cuanto estar conectado a la tecnología afectaba a la familia, la productividad y la manera de tratar con las emociones.
Un resultado predecible: Los adictos tenían niveles más altos de depresión, ansiedad, insomnio e impulsividad. Pero lo más novedoso, fue el descubrimiento de cómo la nomophobia (*) afecta la química del cerebro. Según The Independient (1)
Los jóvenes dependientes mostraron oscilaciones en la presencia de ácido gamma-aminobutírico, glutamato y glutamina. Estos están relacionados a dos neurotransmisores responsables para el funcionamiento de la actividad cerebral.
Cuanto mayor es el nivel de cambio de estos, más grave era la condición de adicción al celular.
El problema puede ser considerado grave cuando se considera que el 92% de los adolescentes están conectados al internet. Por lo general a través de los teléfonos móviles. Un usuario típico a menudo toca más de 2.600 veces la pantalla del móvil por día.
(*)Este es el término que describe la dependencia de los teléfonos inteligentes
¿Qué te parece?